
No eras aún cojo,
ni tropezaste con pandillas,
tu único socio usaba joyas de minas,
vendías riquezas a los ricos,
consumías en botellas la alegría
con pasaporte para cauterizar el miedo en la orillas,
galán sin amores, coqueteos con cualquiera
explorador de bárbaros, cajón y ron
otorgando favores a tu nave calavera,
que funda en Íbero a Nova Albión,
a tu merced la mala calaña,
pagando el peaje sucio de los puertos,
¿sabes tú cuántos años tiene España?
no te imaginas cómo se revuelcan los muertos,
a tu flota de moho sobre expedición en la Indias,
mucha caña, algunas vidas
y la bendición de los moros,
con una armada invencible, cancelaron las divisas
de la sangre que se cicatriza en la corrida de toros,
con espadas que te temen
y amantes con corset,
mucho ladran los que quieren
hablamos de Sir Francis Drake
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